Meg Stuart

Una velada de solos

Viernes 8 de noviembre, 2019 - 19:00 h
Entrada gratuita previa retirada de entradas en taquillas (agotadas online). Máximo 2 por persona.
Lugar
Edificio Nouvel, Auditorio 400
Ficha artística

Coreografía e interpretación: Meg Stuart

Música en directo: Brendan Dougherty

Diseño de luces: Emanuelle Petit

Diseño de sonido: Vincent Malstaf 

Dirección técnica: Jitske Vandenbussche

Asistencia técnica: Kobe Le Duc

Gira: Delphine Vincent

Distribución en España: Mondigromax, Cultivos de cultura

Producción: Damaged Goods (Bruselas)

Apoyos: Gobierno Flamenco y Comisión de la Comunidad Flamenca

Organiza
Museo Reina Sofía
Comisariado
Isabel de Naverán
Meg Stuart, An evening of solo works [Una velada de solos], 2018. Fotografía: © Giannina Urmeneta Ottiker
Meg Stuart, An evening of solo works [Una velada de solos], 2018. Fotografía: © Giannina Urmeneta Ottiker

¿Cómo se pueden traducir en movimiento las sensaciones y los monólogos interiores? ¿Es posible detectar las vacilaciones antes de hablar, los movimientos involuntarios, los espacios a los que viajamos cuando soñamos despiertos, los recuerdos y las proyecciones que turban nuestra conciencia del presente?

Meg Stuart

Como parte del ciclo de artes escénicas realizado en colaboración con los Teatros del Canal de la Comunidad de Madrid, el Museo Reina Sofía presenta Una velada de solos, de la coreógrafa Meg Stuart. Al finalizar, tendrá lugar una conversación con la artista presentada y moderada por Isabel de Naverán.

En esta velada, Stuart retoma varios solos creados entre 1995 y 2018 en los que reflexiona sobre su condición de mujer, de coreógrafa, de trabajadora, de amante. Su hacer cuestiona las funciones, roles, estatus y relaciones de poder a través del trabajo físico, poético y emocional como motor del movimiento. Su práctica está atravesada por el diálogo que sostiene con la diversa comunidad de colaboradores de los que habitualmente se rodea —músicos, artistas visuales, cineastas—, pero también por las imágenes, deseos y preguntas que la acompañan a lo largo de su trayectoria y que adquieren una textura particularmente poética en sus solos.

La comisaria e investigadora Susan Gibb escribió a propósito de su trabajo que es el movimiento, más que la danza, lo que mejor describe su medio; un movimiento al que recurre guiada por su deseo incansable de explorar las profundidades misteriosas de la experiencia y de las relaciones humanas.

Desde que en 1991 presentó Disfigure Study en el Festival Klapstuk de Lovaina, Stuart se convirtió en referente de cierta escena de la danza europea como parte de una constelación de coreógrafos formada, entre otros, por João Fiadeiro, Vera Mantero, Alain Platel o, en España, Mónica Valenciano, quien también se dio a conocer en esta significativa edición de Klapstuk comisariada por Bruno Verbergt. A partir de entonces, el lenguaje de Stuart pareció asumir el cuerpo como una entidad física necesariamente vulnerable que, siendo distorsionada y desplazada por el movimiento, puede tener voz y significado. Esta línea de investigación en torno a las potencialidades del cuerpo en cuanto a materialidad, con su capacidad de afectar y de enunciar, y, sobre todo, de generar nuevos modos de relación, se convirtió en una constante en sus trabajos posteriores.

Mediante la improvisación Stuart indaga en dichas cuestiones, situándose en terrenos abonados por la incertidumbre, la duda y la sospecha de que las cosas, las relaciones y los pensamientos podrían ser de otra manera: podrían darse y revelarse en y a través del movimiento que se transforma y nos redefine continuamente, afectando a la variedad de estados físicos, mentales y emocionales que determinan nuestro modo de habitar el mundo.

Meg Stuart es una coreógrafa y bailarina estadounidense nacida en Nueva Orleans en 1965 que vive y trabaja entre Berlín y Bruselas. Estudió danza en la Universidad de Nueva York, ciudad a la que se trasladó en 1983 y donde continuó su formación en el centro Movement Research. En 1991 presentó en el Festival Klapstuk de Lovaina su primera pieza de larga duración, Disfigure Study, y en 1994 fundó su compañía Damaged Goods, cumpliendo así su deseo de disponer de una estructura propia para desarrollar proyectos artísticos. Con Damaged Goods ha creado más de treinta producciones, desde solos hasta coreografías de gran escala como Visitors Only (2003), Built to Last (2012) o UNTIL OUR HEARTS STOP (2015).

Ha trabajado con artistas como Philipp Gehmacher, Ann Hamilton, Claudia Hill, Benoit Lachambre, Brendan Dougherty y Hahn Rowe. Asimismo, se ha implicado en proyectos audiovisuales, instalaciones y creaciones in situ como Projecting [Space], presentada en el festival Ruhrtriennale (Alemania) de 2017, en el que ella y Damaged Goods trabajaron entre 2015 y 2017 invitados por el director teatral Johan Simons. También en el ámbito de la improvisación, ha impulsado y participado activamente en proyectos como Crash Landing (1996-1999) y Auf den Tisch! (2004-2011). En 2016, presentó City Lights - a continuous gathering en el teatro HAU Hebbel am Ufer de Berlín, en colaboración con un grupo femenino de artistas locales.

Ha participado en residencias artísticas en los teatros Schauspielhaus Zürich (Zúrich, 2000-2004) y en Volksbühne Rosa-Luxemburg-Platz (Berlín, 2005-2010) y colaborado con directores teatrales como Stefan Pucher, Christoph Marthaler y Frank Castorf.

Desde el año 2010, Meg Stuart, junto a Damaged Goods, trabaja como artista asociada en el teatro Kammerspiele en Múnich. Además, su compañía colabora regularmente con otros centros escénicos como el Kaaitheater de Bruselas y el HAU Hebbel am Ufer de Berlín.

Su obra ha sido presentada en un amplio circuito internacional de teatros, además de citas como documenta X en Kassel (1997) y Manifesta 7 en Bolzano (2008). En 2008, recibió el Premio Bessie por su trabajo y el Premio de Cultura Flamenca de Bélgica en la categoría artes escénicas, y en 2012 la Academia de las Artes de Berlín le otorgó el Premio Konrad-Wolf.

En 2018, la Bienal de Venecia reconoció su trayectoria y aportación a la danza con el León de Oro.


Con la colaboración de